«llegaste un día, no sé si era de noche o de día.
Silencioso, descalzo, sin olores,
y mientras dormía mi alma, la buscaste a ella,
quizás por ser la más dulce de mis frutos.
Llegaste un día, no sé si de noche o de día.
Ni te sentí, ni te escuché, pero ese día te llevaste mi bien más preciado, te llevaste la inocencia de mi niña.
El día que llegaste, fuera de noche o de día,
Hiciste daño, tanto….., me dejaste sin ropa, con la piel fría, sin llanto, sin suelo.
No llamaste a mi puerta, no pediste permiso, te llevaste la brisa fresca y el aire cálido.
Pero HOY, un año después, querido Dolor, te vigilo, te busco en mis sueños, y advierto que ya tengo piel, que siento el suelo muy firme, y levanto la vista.
Ya no tiemblo y sí peleo.
Ya no me sorprendes porque quizás te espero»
Un año después, sólo deseo hoy celebrar la vida, agradecer la posibilidad de tener tratamiento, Agradecer a sus padrinos, ser sus Grandes Padres, a mis amigos Alsira, Javier, Nines, Natalia, Patricia por ser mi consuelo y mi apoyo, a mi familia de sangre y a mi familia virtual Noches sin Dormir por ser los que jamás me han dejado caer y a Elisa Lopez Calvo por guiarme entre las tinieblas y a todas la mamis dulces y Dulces amigas que nos ayudais a superarnos.
Os queremos.
Os comparto a la guerrera, dos días después de su debut, su cara sus siete KIlos menos y la Águeda de AHORA, la que vuela.
Yolanda Carreiro