Marina

Debut de Leire, 11 de junio de 2010.
Era viernes, nunca olvidaré ese día…aún sigo llorando cuando lo recuerdo, y eso que ya han pasado CASI CUATRO AÑOS!! a los más futboleros les sonará esa fecha…sí, ese día comenzaba el mundial de fúbol de Sudáfrica.
En mi empresa reinaba el nerviosismo que conlleva el emitir un acontecimiento deportivo a esa escala. Todos estábamos deseando ver esos primeros partidos de la selección.
Para más alegría si cabe, esa tarde se celebraba la fiesta del cole de mis hijas, ya estaba acabando el curso y era un acontecimiento muy esperado por nuestras pequeñas.
Pero el destino nos tenía preparada otra tarde totalmente distinta….me duele el alma solo recordarlo….Leire llevaba un par de meses perdiendo peso, pero eso a sus tres añitos y dado que era una niña regordilla, nos pareció normal porque pensabamos que se debía al cambio de cuerpecillo de bebé a niña, y además, comía mejor que nunca.. ERROR! luego comenzó a beber en exceso, pero coincidió con unos días especialmente calurosos, recuerdo que en mi bolso nunca faltaban galletas y agua, claro, era la manera del cuerpo de compensar las subidas y bajadas..hasta su profe me dijo en el mes de mayo que la niña parecía cansada, lo achaqué a que como la dejaba en el cole a las ocho de la mañana y la recogíamos a las cinco de la tarde, que era mucha tela para ser tan pequeñita ERROR!.
La alarma definitiva saltó el día que se le escapó el pipi en la cama…..y mi marido vistiendola para ir al cole, se asustó al ver que la falda del uniforme le colgaba literalmente de los tirantes. Yo tengo tres primos diabeticos desde muy chiquititos, y aunque no lo quería ver, sabía que aquello pintaba a lo que no qureía ni nombrar, DIABETES.
El día anterior, el jueves, antes de salir de trabajar, comenté con mi jefa, que esa misma tarde iba a llevar a la niña al médico debido a que sospechábamos que algo le sucedía a Leire, el pediatra no entendía muy bien mis sospechas, ya que la niña no tenía segun él un cuadro típico de debut, como se acababa de comer unas galletas no le hizo una glucemia capilar, pero me dijo que la llevara al día siguiente para hacéesela, y
claro, cuando el viernes se la hizo la enfermera, de ahí al hospital, tenía
casi 600!!!
Luego ya sabéis, el remordimiento de pensar que le podía haber ocurrido algo grave a tu hija debido a esta maldita enfermedad…
Luego las cosas que Leire nos decía., mami cuando se se me va quitar la diabetes?
El resto continúa como ya sabéis…pinchazos, subidas, bajadas….

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